sábado, 31 de marzo de 2012

Trigo y molino: profecía cristiana y crisis



Trigo y molino, del cantautor venezolano Alí Primera, me ha acompañado desde mis primeros años universitarios en Venezuela. El canto, nacido en otro contexto, ha recobrado una especial vigencia para mí en el marco de la crisis económica que azota con crudeza a España y a otros países de Europa.

Aquí se tocan verdades santas del Evangelio que, sencillamente, debieran sacudirnos.

Escuchemos el canto de Alí con el crucifijo en la mano, que nuestros ojos se abran para VER a Jesús de Nazaret escondido en los rasgos sufrientes de nuestros hermanos y hermanas. 

A veces pienso que los que dictan leyes económicas injustas, los que se enriquecen y acaparan los recursos, los que manipulan los mercados a su antojo, desde sus despachos con aire acondicionado o calefacción a tope, han dejado de VER la realidad concreta de sus hermanos y hermanas.

Simplemente no ven, y como están ciegos, no SIENTEN las nefastas consecuencias sociales de las decisiones que toman allá, en oficinas muy elegantes, lejos, muy lejos, de la cotidianidad de los ciudadanos y las ciudadanas comunes y corrientes.

Los hombres y mujeres que pueblan nuestras calles, que luchan por encontrar un empleo, o por llegar a fin de mes, o por salir de la esclavitud de deudas infinitas, o por librarse de un desahucio, se sienten indefensos frente a la jauría de los poderes económicos y políticos. 

La indefensión es el sentimiento típico de las víctimas. 

El Evangelio nos enseña a reconocer la presencia de Jesús, precisamente, en los indefensos y afligidos de este mundo, ellos y ellas son para nosotros, sacramento de su presencia viva en medio de la historia.

Pero no basta con VER. A los discípulos de Jesús nos toca también DENUNCIAR: el eje de la vida social y política no puede ser la gestión financiera, sino el bienestar de las personas, la dignidad de las personas, la realización de ciertos valores básicos como la justicia, la libertad, la igualdad, el amor, la solidaridad.

Pero los que manejan el poder político y económico en Europa, y por ende en España, pasan un kilo del Evangelio, del Sermón de la Montaña, del mandamiento nuevo del Amor fraterno, de la doctrina social de la Iglesia, y así nos va. 

Ciegos, lo repito, ciegos y duros de corazón. 

A veces pienso que la única preocupación de los países que mandan en la Unión Europea, y de su banca, es que cuadren los balances y que se reduzca el déficit, sin el menor tipo de consideración social sobre las consecuencias que pueden tener sobre la población las medidas que exigen a países como Grecia, España, Portugal, Italia

En medio de esta hora difícil los cristianos somos también portadores de un ANUNCIO: la esperanza. Creemos en la fuerza del Espíritu Santo que mueve a la gente de buena voluntad, nos cura de la ceguera y suscita nuevos caminos de justicia y solidaridad. Jesucristo, el Señor de la historia, nos acompaña siempre en la lucha y nos ánima a conquistar esa tierra nueva de justicia y fraternidad.

VER-DENUNCIAR-ANUNCIAR: una experiencia vocacional de profecía cristiana, al estilo de Elías, el heraldo del Monte Carmelo, y de todos los profetas del Antiguo Testamento. 

Al estilo de Jesús de Nazaret, el testigo fiel, cuyo martirio de cruz, y gloriosa resurrección, nos disponemos a celebrar en esta Semana Santa.

Oremos mucho por nuestro querido pueblo que sufre, oremos con el Evangelio y en compañía de María, nuestra buena Madre, presentemos a Dios, Padre misericordioso, el sufrimiento de los afligidos y pidamos al Espíritu Santo la valentía y la sabiduría para vivir nuestra vocación profética con fidelidad y entrega. Amén.

                                                                          @MarceloMartín




jueves, 29 de marzo de 2012

Las competencias básicas y el aprendizaje cooperativo


Algunos opinan que el paradigma de las competencias básicas responde a un modelo de sociedad centrado en el consumo y la productividad individualista, es decir, lo más parecido a las modernas sociedades capitalistas.

La llamada teoría crítica de la educación, muy en boga en los sesenta y de inspiración marxista, decía que la misión real de la escuela era servir de justificativo ideológico del sistema social, con todas sus contradicciones, contribuyendo a su reproducción y perpetuamiento en las mentes de los ciudadanos y ciudadanas que egresaban de sus muros.

Mucho ha llovido desde entonces, y, sin embargo, sigo pensando que algo de cierto hay en este planteamiento. Especialmente cuando la experiencia educativa que se ofrece se limita a impartir conocimientos como si fueran las monadas de Leibniz, encerrados en si mismos, y desconectados del mundo real.

O cuando nos ajustamos acríticamente al ideal del éxito individual, el trabajo individual, la calificación individual, los saberes individuales, los méritos individuales,....

Pero podemos educar de otra manera, podemos asumir una postura crítica frente a lo que ocurre más allá de las ventanas del aula, podemos ofrecer una propuesta humanizadora, despertando en las mentes juveniles el gusanillo del cambio por la justicia social, por la igualdad, por la superación de los males tremendos del modelo social que soportamos, hijos del lucro desmedido y la idolatría de la ganancia.

Podemos partir del aprendizaje cooperativo, fomentar la sinergia de grupo, los liderazgos democráticos y participativos, el compromiso por el logro de determinadas metas, la definición compartida de objetivos y normas, las tareas comunes, la ilusión de aprender juntos.

No se trata de simple retórica. La cooperación como valor social se promueve a través de múltiples formas y debería imprimir toda nuestra praxis educativa: la disposición del aula, los criterios de evaluación y calificación, las actividades y tareas, los acuerdos y las normas del grupo, las medidas de refuerzo educativo y de atención a la diversidad, etc.

En este camino, el problema no son las competencias básicas, sino las opciones pedagógicas de los educadores: o formamos ciudadanos y ciudadanas competentes para que se desenvuelvan con relativo éxito en el competido medio social contemporáneo, pero sin cambiarlo; o formamos ciudadanos y ciudadanas competentes para la cooperación y la solidaridad, para la realización de un proyecto distinto de humanidad en consonancia con los valores de la ética y el compromiso social.

Si las competencias básicas responden a un modelo antropológico productivista e individualista, nuestro reto es ¡darles la vuelta!, y que se conviertan en promotoras de una concepción de la persona humana, y de la sociedad, más acorde con las propuesta liberadora de Jesús de Nazaret.

Para los que quieran seguir reflexionando sobre el tema del Aprendizaje Cooperativo, he reunido en un archivo rar, una serie de documentos y textos, algunos en base a experiencias educativas concretas, relativos a esta metodología y opción pedagógica.

APRENDIZAJE COOPERATIVO: DESCARGAR

La financiación de la Iglesia: deshaciendo mitos


Ultimamente me he dado cuenta que Twitter, la red social de los 144 carácteres, puede ser un arsenal de información sobre lo que ocurre y se cocina en el mundo, y que entre el vendaval de cosas que corren minuto a minuto por el entramado del Internet, facilita un montón la tarea de identificar lo verdaderamente importante.

Pues bien, vía Twitter, he conocido el interesante blog Verdadera Izquierda,  leyéndolo me he tropezado con una entrada sobre el problema tan manido de la financiación de la Iglesia española. Sencillamente me ha parecido de una gran lucidez y claridad, deshaciendo esos mitos que se propalan a través de ciertos medios, y que no cesan de atribuir a la Iglesia una serie de privilegios que, hablando en plata, no son verdad.

Sin más preámbulos, posteo a continuación el citado artículo: 

Respuesta a un email impertinente (Sobre la Iglesia)


Circula estos días por la Red, un email absolutamente demagógico en el que se pide reenvíes el mismo a 20 personas para que "en pocos días lo pueda recibir la mitad de la gente conectada en el Estado español".
Imágen usada por los ateos antiiglesia.
En dicho panfleto redactado en las sedes de Compromís, entre otras lindezas, se afirma que "Si el viernes, día 30 de diciembre, el consejo de ministros del Partido Popular (PP) acordó rebajar un 20 por ciento la subvención a los partidos políticos y a los sindicatos, para ajustar el déficit fiscal, pedimos que se le retire también la subvención de 1000 millones de Euros a la Iglesia Católica".

Dicho correo, que circula principalmente entre miembros de nuestra "Comunidad Educativa" (léase sindicalistas, liberados y funcionarios ofendidos por los recortes de sus perennes sueldos), me llegó hace unos días, vía un conocido, al que me permití responder de la siguiente forma:

Mi querido amigo:

Espero que no te sepa mal, pero no voy a difundir el correo que me envías porque las cosas yo las veo conforme te voy a explicar.

Los que lo deseamos, ponemos la cruz para la Iglesia, y de ahí sale el dinero que se le da. No sale del bolsillo de todos, sale del bolsillo de los que libremente hemos decidido dar una parte de nuestros impuestos a la Iglesia. Ya me gustaría que hubiera más crucecitas en mi Declaración de la Renta, para sindicatos, para partidos políticos, para cine, para ONGS inútiles, y que todos pudiéramos libremente elegir qué se hace con nuestros impuestos. Pero no, desgraciadamente no es así. Por lo tanto, la próxima vez que hables de "subvención" a la Iglesia Católica, infórmate adecuadamente o simplemente, no mientas.
Casilla Declaración de la Renta
Por otra parte, la Iglesia ahorra al Estado unos 30.000 millones de euros, que es lo que costaría al Estado el que tuviera que hacerse cargo de los colegios, de Cáritas, del mantenimiento de los edificios artísticos que cuida la Iglesia y de los asilos de ancianos que dependen de ella. Hay mucha información tergiversada, manipulada y claramente falsa contra la Iglesia, cuando la realidad es que la mayoría de parados comen gracias a Cáritas (yo no tardaré mucho) y el 90% de nuestros ancianos, de los ancianos de todos, terminan sus días en un asilo con una monjita limpiándoles el culo.

Mi querido amigo, con el sueldo de los cargos de libre disposición (sindicalistas, familiares y amigos de políticos y otras gentes de parecido pelaje) saldríamos de la crisis en menos de 24 horas, tenlo por seguro. Pero el círculo cerrado de 80-90.000 políticos que han creado una auténtica casta dominante que ríase usted de los señores feudales, no están por la labor de cambiar un sistema que se cae a pedazos y en el que, el que no es corrupto, es una excepción. Y eso va por TODOS los políticos.

Me parece muy injusto que a algunos funcionarios se os haya recortado el sueldo un 10% (lo hizo Zapatero) y que a otros se os haya revisado el tema de los sexenios (lo ha hecho Fabra). No sé si son recortes justos o no, que probablemente no, pero me parece de una insolidaridad y de una jeta impresionante que las únicas personas de este país que tenéis vuestro puesto de trabajo asegurado de por vida, estéis quejándoos cuando la situación es la que es, y somos más de 5 millones de parados, prácticamente sin salida.

El país está en quiebra técnica gracias a la inepta gestión de un Presidente al que padeciendo el síndrome de Peter Pan, todos le reíais las gracietas y el despilfarro que ha hundido a España. El Sr. que nos ha llevado donde estamos ocupa ahora un puesto muy bien remunerado en el Consejo de Estado, y mientras estuvo en el poder destruyendo el tejido económico de España, y creando esta situación y 5 millones de parados, nadie abrió la boca, nadie se quejó, nadie se manifestó y nadie fue a pegarle fuego ni a rodear la sede de su partido, que por el bien de España y en pago al daño causado, convendrás conmigo en que debería desaparecer.

Ahora, mi querido amigo, toca pagar las deudas que ese señor creó, porque las deudas se pagan. O eso, o nos convertimos en Grecia. Cosa que creo, no os gustaría, ya que los primeros que perderíais vuestros privilegios seríais los funcionarios.

Quejándose, manifestándose y llamando fascistas a la policía por el mero hecho de cumplir su deber, no se van a arreglar las cosas.

Las tácticas propagandísticas de Goebbels, algunos las conocen a la perfección, y las están usando, vaya si las están usando, pero una mentira, aunque se repita un millón de veces sigue siendo mentira. Y la Iglesia no es culpable de nada mi queridísimo amigo, ni de la crisis, ni de los 5 millones de parados, ni de que a ti y a tus compañeros os hayan recortado la nómina.

La Iglesia, no lo olvides cuando vuelvas a hablar de ella, ha dado y está dando de comer a mucha gente gracias a lo que voluntariamente aportamos algunos. No he visto ningún comedor social en la sede de ningún sindicato ni en la de ningún partido político.

Y la gente, tiene hambre, no ganas de salir a hacer el idiota a la calle.

Esperando entiendas mis razones para no difundir tu demagógico correo, recibe un cordial saludo de tu amigo:


miércoles, 28 de marzo de 2012

La cumparsita: vivir es continuar




He aquí un tango,... el vaiven de las notas al filo del poema, el taconear de hombres y mujeres que no mueren, que perviven en una historia de pasión que se despeña bajo el desfiladero de los sentimientos.

Las melodías que tocan nuestro corazón no se explican ni se razonan, se sienten, y punto.

Las injusticias de la soledad no deseada, el reclamo de un cariño perdido, el continuar del tiempo sobre la espalda, implacable.

Vivir es muchas veces continuar.

Eso tiene de frenético el tango La cumparsita, una vez que lo bailas, no puedes parar, sigue danzando en ti, en cada uno de los personajes que te habitan.

Somos muchos.

He aquí la versión original en la voz inolvidable de Carlos Gardel:

lunes, 26 de marzo de 2012

El futuro de la enseñanza de la Religión


Los pasados 15, 16 y 17 de marzo se ha celebrado en Murcia un importante Congreso sobre el futuro de la enseñanza de la Religión organizado por la Delegación de Educación de la diócesis de Murcia, personificada en don Juan Carlos García Domene, un verdadero dinamizador.

He participado en este Congreso formando parte de una Mesa Redonda y presentando una ponencia “a dos voces” con la teóloga Mercedes Serrano sobre “Profesorado, vocación, misión y profesionalidad”. Ha sido para mí una gran oportunidad como católica, como profesora, y como vicepresidenta de ANPE, el sindicato más representativo para el profesorado de Religión.

Me parece que la organización de este congreso ha sido oportuna porque obedece a tres necesidades apremiantes.

La primera necesidad es la clarificación de posturas ante la profunda crisis de valores que está determinando en Occidente un verdadero cambio de época histórica. Me parece que, frente a la vorágine de nuestro tiempo, el hombre de hoy está frente a un Kairós, una oportunidad: la de recobrarse a sí mismo. En este contexto, las creencias religiosas y su traducción práctica en las decisiones morales, el afán por la trascendencia a nivel espiritual y la práctica religiosa como parte de una comunidad de creyentes tienen sentido, obedecen a una necesidad salvífica del presente.

El segundo motivo por el cual este congreso es oportuno se refiere, más sencillamente, a la importancia creciente que ocupa la educación en los intereses contemporáneos. Nos espera un tiempo de cambios y reformas. Y cuando el péndulo comience a oscilar, el profesor o la profesora de Religión deben encontrarse ahí, entre el resto de los profesionales educativos, como miembros implicados en la marcha de los centros, en la comunicación con las familias, en los problemas de los alumnos y en las soluciones.

La tercera necesidad es la de defender al profesorado de Religión, que no es un ejemplar raro ni peculiar entre los demás profesores sino un testigo, un educador y un profesional, como lo son – o deben ser- todos los demás profesores en sus respectivos ámbitos.

Defender al profesor de Religión es defender la asignatura que imparte, y eso debe comprenderlo el propio profesorado, llamado a ejercer su vocación en los claustros y ante todos los alumnos. Pero debe comprenderlo así también la propia Conferencia Episcopal, que debe escoger con rigor a sus representantes, por supuesto, pero defendiendo los principios constitucionales de igualdad, mérito y capacidad, para que la legitimidad de cada profesor cuando llegue a un centro sea intachable. Y también es importante confiar en las organizaciones que pueden representar a este profesorado de manera efectiva en los ámbitos de negociación de sus condiciones laborales.

El profesor de Religión es un educador, un testigo y un profesional. Si me lo permiten, intentaré desarrollar brevemente estos tres aspectos en los próximos días.

Quisiera terminar ahora con una frase de Martin Buber, que explica cuál es la responsabilidad de la tarea docente: Ser responsable es dirigir una palabra y esperar una respuesta.

Esa es la esencia del trabajo de los profesores de Religión. Deseo de todo corazón que no desfallezcan en esa maravillosa tarea que les ha tocado desempeñar en el ámbito profesional.

Carmen Gauita

domingo, 25 de marzo de 2012

Campos de Primavera con música de Taizé




Un vídeo que conjuga hermosos paisajes de primavera con una entrañable canción de Taizé: Dios no puede más que darnos su amor. Imágenes y música que imprimen en el corazón la verdad central del cristianismo: Dios es amor.

La belleza del mundo, su majestuosa hermosura, su variedad de formas, la riqueza de los colores, la explosión de movimiento y luz de lo creado, desde la flor más pequeña hasta las más altas montañas, todo habla y pregona la bondad inmensa de Dios.

Una bondad que está al principio de cuanto existe, una bondad que es orden, belleza, armonía, unidad, multiplicidad, derroche, gratuidad,...

El misterio de la vida, que investigan científicos y especialistas, es el mayor testimonio del Dios vivo, quien, según Pablo, es accesible a la razón humana por la contemplación del milagro de la creación: "Porque lo invisible de Dios, desde la creación del mundo, se deja ver a la inteligencia a través de sus obras: su poder eterno y su divinidad,..." (Rom. 1, 20)

Este versículo de la Biblia es para mí uno de los garantes de ese diálogo fecundo que debe darse entre Revelación y Ciencia. Ambas vías, presentes en la historia,  pueden, cada una a su modo, conducir a Dios, el origen y la razón de ser de cuanto existe.

¡Dejemos que esa bondad de las cosas, esa bondad que participa de la misma bondad de Dios, nos toque por dentro para que se revele en nosotros su divina imagen, y experimentemos su gran amor y su ternura por cada uno de nosotros y nosotras!

sábado, 24 de marzo de 2012

6 razones para educar a los niños en el uso de las redes sociales


He encontrado, vía Twitter, un excelente artículo sobre un tema delicado y que, como educador, me interesa sobremanera: ¿cómo educar a los adolescentes en el uso de las redes sociales?

No sé si a los demás profes les sucede lo mismo, pero cada vez que llevo a los alumnos a la sala de ordenadores (en Canarias: el "Aula Medusa"), tengo que tener unos 2000 ojos porque en lo que me descuido ¡zas!, se me meten en el Tuenti, o en Facebook,...

Estos adolescentes nuestros están seducidos por las redes sociales, y si dependiera de ellos, vivirían conectados todo el santo día.

La clásica reacción de los adultos es demonizar las redes, por peligrosas, adictivas, inútiles, y pare usted de contar. Pero los chicos van a lo que van, la mayoría pasan de nosotros, y si no ponemos algún tipo de control, se les iría el tiempo intercambiando frases (a veces bastante geniales y divertidas) y, sobre todo, fotos.

Para un segmento de los chicos, estar conectados permanentemente con su red de amigos y followers se ha convertido en una necesidad vital. Si no es así alguien quiere explicarme que hace un pibe de 13 o 14 años con una Blackberry u otro aparato con conexión las 24 horas del día a Internet, ¿para qué lo necesita?, ¿para hacer el trabajo de sociales?, sí, sí,...

También me pregunto, y no es por tocar las narices, qué hace un padre o una madre pagándole una tarifa plana a un chico en el móvil, ¿cómo lo justifica?, ¿para qué se le pase el tiempo intercambiando chorradas con los colegas?, ¿para qué no se nos traumatice porque sus amiguitos si tienen y él no?,..¡Hombre, por favor!

De todas maneras, siendo realistas, está claro que la solución no es prohibir sin más, sino educarles para que hagan un uso inteligente de las redes.

Y, precisamente, el artículo que a continuación posteo, firmado por Carolina Velasco, apunta hacia la dirección acertada: la educación. 


6 RAZONES PARA EDUCAR A LOS NIÑOS EN EL USO DE LAS REDES SOCIALES

Carolina Velasco

Decir que las redes sociales han llegado para quedarse suena ciertamente repetitivo, pero ahondar en cómo el fenómeno social nos obliga a revisar todos los paradigmas relacionados con nuestros hábitos y costumbres, específicamente en aquellos en los que la formación y la educación ejercen un papel determinante en la toma de decisiones acertadas, no es tan habitual.

1. Nuestros hijos son seres sociales

Nacen con la capacidad par cuestionarse, aprender, resolver problemas y tomar decisiones. El fenómeno social no permanece al margen del proceso formativo de las nuevas generaciones.

Lo que presenta un gran desafío, tanto para los padres como para los docentes, es cómo formarse adecuadamente en la prevención de los riesgos, que sin duda existen, para aprovechar las ventajas que el social media nos ofrece.

2. Impedir no es la solución

Es de sobra conocida la tendencia del ser humano a sentirse atraído por todo lo que está prohibido; las redes sociales nos enseñan cómo interactuar en el nuevo orden social, a tiempo que marcan las pautas por las que transita tanto el modelo educativo, como el productivo, en la actualidad.

3. Autocuidado y privacidad

No cabe ninguna duda que, al margen e la innovación tecnológica que estamos viviendo, el “autocuidado” y la privacidad son dos variables indispensables al abordar la formación y educación social de nuestros hijos.

Como vemos, no resulta tan difícil aplicar el sentido común al enseñar a nuestros hijos cómo se interactúa en las redes sociales y qué es lo que no deben hacer.

4. Diálogo, familias 2.0

El diálogo es hoy el nexo conductor entre los padres y los hijos. Volvemos a “re-colocarnos” tras un ciclo de educación represiva, y otro de educación excesivamente permisiva. Nos encontramos ante la nueva familia que, a través del diálogo abierto y la escucha activa de la opinión de sus hijos, se aborda de una forma sana en la educación y el uso de las nuevas tecnologías y el manejo eficiente de la información expuesta.

5. Autoestima, ¿para qué no es necesaria?

Ahora que nos adentramos en un modelo basado en la interacción social, un nuevo ciclo en el que debemos recuperar la confianza en el otro a través de la aceptación de que el compromiso ya no es opcional, no es de extrañar que formar hijos con autoestimas férreas es indispensable para ciclos convulsos e inciertos como el actual.

Las redes sociales son una magnífica herramienta para enseñar a nuestros hijos a decir “no” sin perder ni un ápice su presencia social.

6. Los riesgos, siempre presentes

Es evidente que los datos de carácter personal implican los mayores riesgos del uso de las redes sociales por parte de los niños.

Aquí, además de formar, es importante tener presente que las opciones de privacidad están perfectamente establecidas por parámetros, y que son una responsabilidad nuestra como padres.

Ventajas de educar a nuestros hijos en el uso de las redes sociales

Las redes sociales son plataformas en las que las relaciones se establecen a partir de la exaltación de los valores inherentes a los seres humanos. 

La influencia es medible, cuantificable y modificable en tiempo real. El acceso a juegos, aplicaciones y herramientas no es sino a través de las reglas del juego que sustentan a través de la generación de confianza, y, por supuesto, de la interacción en red se fomenta la innovación y la creatividad, lo que está en total concordancia con los requisitos del nuevo modelo educativo. Formar a nuestros hijos en el emprendimiento es la mejor forma de hacerlos fuertes ante el contexto histórico que les tocó vivir.

Consejos para lograrlo

Naveguemos habitualmente con nuestros hijos; hagamos que se familiaricen a Internet. Expliquémosles para qué se utilizan cada uno de los filtros de la Red y la razón por la que deben ejercer una labor activa de precaución a la hora de navegar.

Las redes sociales e Internet, en su globalidad, son una eficiente herramienta de apoyo en sus procesos de aprendizaje. Eso sin olvidar que, de la interacción en este ciclo social por el que transitamos todos, se generan nuevas formas de comunicación entre las familias, más centradas en la vuelta a los valores tradicionales y, por lo tanto, mucho más gratificantes como experiencia para los hijos y para los padres.

Las redes sociales llegaron para entregarnos la información en tiempo real. Debemos asegurarnos que el uso que les damos es el que nos permite desarrollarnos. Como decía Darwin: “sólo quien se adapte logrará sobrevivir”. Bajo esa premisa hay que formar a los niños para el uso de las redes sociales.




viernes, 23 de marzo de 2012

El Vía Crucis de Fano: Empatía, misericordia e inteligencia social.
































 Las estaciones del Vía Crucis recreadas a través del trazo evangélico del dibujante Fano, a color y con su correspondiente dibujo para su uso por los chicos y chicas de la Clase de Religión o la Catequesis.

Seguir a Jesús por el camino de la cruz debería avivar en nosotros el amor al Señor, que ha dado su vida por nosotros. Para que en nuestro seguimiento y discipulado nos vayamos revistiendo de los mismos sentimientos de Cristo, de su humildad y amor, de su pobreza y obediencia al Padre.

Pero el Vía Crucis debe ir más allá, debe también abrir nuestros ojos y liberar el corazón para que reconozcamos al Jesús sufriente que padece en las injusticias y en los dolores que soportan los pobres, los hambrientos, los desnudos, los forasteros, los sedientos de nuestro hoy situado.

En esta lista de sufridos Jesúses  incluimos a las víctimas de las arbitrariedades de los mercados y de políticas económicas anti-reino de Dios, a los parados, a los que soportan deudas impagables, a los que padecen los horrores de la guerra y la violencia. En definitiva, a todas las víctimas.

Consolar y acompañar a Jesús en su camino de la cruz, consolar y acompañar a Jesús en el camino de la cruz que recorre en el dolor actual de nuestros hermanos y hermanas.

La sabiduría de la cruz es la sabiduría del amor.

Enseñemos a nuestros alumnos y alumnas a encontrar a Jesucristo en el hermano y la hermana que sufre. Que aprendan nuestros chicos y chicas a reconocer los sentimientos de los demás, a ponerse en el lugar del otro, a crecer en empatía para que desarrollen su inteligencia social y emocional.

Y el Vía Crucis puede ser un buen camino para lograrlo.

En lenguaje cristiano, que sean compasivos y misericordiosos, como el bueno de Jesús. Amén.

Je veux: ¡Quiero!



Una canción de la francesa Zaz resuena con su magia entre el río de las calles, trastocando lógicas, subvirtiendo el orden de los "quereres" establecidos, con desparpajo y arte, con talento y gracia.

Profecía y proclama poética.

En un mundo de espantosas desigualdades, de soledades que no terminan de encontrarse, de agendas apretadas que siempre se quedan por cumplir, he aquí el reclamo de la soberana gratuidad del buen humor, una diversión que se expande, y se convierte en medicina para el alma.

¿De qué vale el oro del mundo si no tengo el amor de la gente: amigos, compañeros, pareja, hijos, hermanos,...?

El reto: vivir, pero vivir de verdad, a fondo, con el corazón en la mano, recuperando la libertad de los hombres y las mujeres de bien. 

Amando a los demás.

Recuperar las raíces de nuestra humanidad, ser persona, comunicarse, abrazar a nuestros amigos, perdonar, y pasar un kilo de los prejuicios y las caretas que ahogan la vida.

Seamos felices hoy y aquí, con lo que tenemos. No lo posterguemos para mañana.

La medida de nuestra felicidad, es la felicidad que damos a los otros. Y no digo más

martes, 20 de marzo de 2012

SEMANA SANTA: Recursos para la clase de Religión


La cercanía de los días santos es una ocasión propicia para repasar, en la clase de Religión, el significado de los misterios centrales de la fe cristiana, es decir, los acontecimientos que celebramos en la Semana Santa: la pasión y muerte de Jesucristo, el Hijo de Dios, y su resurrección de entre los muertos.

Hace ya algunos años me dí cuenta que, en general, los alumnos y alumnas, desconocen con frecuencia el contenido de lo que los cristianos conmemoramos en la Semana Mayor. Tienen una idea muy vaga en base a lo que escuchan en casa o ven por la tele, o de lo más llamativo como son las procesiones, u otras tradiciones populares.

Es por eso que decidí preparar una ficha muy sencilla, con un apartado de preguntas para completar, y una hoja donde hallan las respuestas. La suelo pasar a los 1º y 2º ESO. Al corregirlas en clase, junto con los chicos y chicas, constato las lagunas que tienen sobre lo que se celebra cada día de la Semana Santa, especialmente lo relativo al Triduo Pascual.

No demos nada por sabido, aunque parezca que repetimos el abc del cristianismo, expliquemos el núcleo de la fe: Jesús de Nazaret, Dios y hombre verdadero, muerto en la cruz por nuestros pecados, resucitado al tercer día, vive para siempre. De la entrega de este amor que nos salva, hacemos memorial en la Semana Santa, actualizando, comunitaria y personalmente, la gracia inefable de la Redención.

En un archivo comprimido, junto con la ficha, he anexionado otros recursos, especialmente útiles para primaria e infantil, con dibujos para colorear sobre los misterios de la pasión y resurrección del Señor.

No sé si a ustedes les pasa lo mismo, pero a veces tengo la impresión que para muchos de nuestros queridos jóvenes seremos el último eslabón de una cadena de transmisión de la fe, que en muchos hogares y ambientes ya no se comunica, por lo menos como se hacía en generaciones anteriores.

Por eso, por eso mismo, seamos valientes, anunciemos la gracia salvadora de la cruz, su amor, su victoria sobre la muerte, sembremos la semilla, y dejemos que el Espíritu Santo realice su obra de misericordia en nuestros alumnos y alumnas.

RECURSOS PARA SEMANA SANTA : DESCARGAR

lunes, 19 de marzo de 2012

En mi Getsemaní: Hermana Glenda


Acompañar a Jesús en su Getsemaní, ser de los amigos que permanecen despiertos a la hora decisiva de la prueba y el conflicto.

Esta canción me conmueve, y, en cierta forma, me sacude por dentro.

Jesús, en el drama de su vida, ha tenido que enfrentar cara a cara la soledad y la angustia, el miedo que corroe por dentro a los hijos de Adán frente a los rigores tremendos del dolor físico, frente al abandono, y frente a la misma muerte.

El desamparo.

Jesús, un hombre bueno, que busca inútilmente el consuelo de sus amigos, y que acude al Padre, llama al Padre, se refugia en el Padre, ofreciendo clamores y lágrimas a quién puede librarle de la muerte. Aprende, sufriendo, a obedecerle.

Jesús revive ahora su Getsemaní en tantos y tantas que sufren: enfermos en hospitales, ancianos que no son atendidos y que vegetan olvidados en un asilo, padres de familia que no consiguen un empleo, presos en las cárceles, torturados, hombres y mujeres sometidos a deudas, embargos, desahucios, niños y jóvenes víctimas de la violencia, la guerra, el desamor, gentes sin amigos y amigas,...

Permanezcamos con ellos y ellas, permanezcamos con Jesús que vive y sufre en ellos y ellas.

Y cuando nos toque a nosotros, cuando el dolor, la angustia, la soledad llamen a nuestra puerta, ¡no desesperemos!,... Busquemos a Jesús, llamemos a Jesús, arrojémonos en sus brazos, él puede comprendernos porque se ha hecho hombre como nosotros y nosotras, no le son ajenas las fatigas humanas, ni le son indiferentes nuestros sufrimientos.

Son tres movimientos, como en el vals: permanecer fieles a Jesús a la hora de la prueba y la tentación, permanecer con Jesús en el sufrimiento del hermano y la hermana; permanecer con Jesús en la travesía de nuestros propios y personales sufrimientos.

Siempre, y en cualquier circunstancia de la vida, permanecer con Jesús.




San José: una escuela actual de espiritualidad

  
Dedico esta entrada a María Auxiliadora, que tiene
a San José como patrono de su blog: En la vía singular de la vida

Cae la noche sobre el Atlántico. La isla enciende sus silencios cargados de secretos.

Mañana es la fiesta de san José, felicidades a todos los Josés, Josefas, Pepes, Pepas, y demás beneficiarios de tal onomástico.

Más allá de la excelsa santidad de José, de sus tradicionales prerrogativas, ¿Tiene su testimonio algo que decirnos a nosotros, los cristianos y las cristianas del Siglo XXI? Porque si el XX fue un cambalache como cantara Gardel, no sé yo qué podemos decir de este por el camino que llevamos,...

Creo que cierta iconografía del esposo de María, y padre nutricio del Hijo de Dios, no nos ayuda mucho, o por lo menos a mí. Un José casi siempre viejito, rodeado de bellos querubes, de mirada lánguida y ricitos dorados,...Ya sé que hay imágenes cargadas de historia, que el pueblo de Dios venera de generación y generación, y que, además, en algunos casos, no carecen de valor artístico. 

Lo único que digo es que, desde esta iconografía, y a veces desde ciertas expresiones, cuesta mogollón identificarlo como un modelo actual de vida y santidad.

Para muchos san José parece un santo antiguo, de otros tiempos, vaya.

¿O no?

Vamos a ver, creo que la clave de la actualidad de José está, como siempre, en volver al Evangelio y redescubrir el testimonio de santidad y vida de este gran creyente, de su aventura humana y espiritual.

En realidad no es mucho lo que la Palabra de Dios nos dice sobre el esposo de Nuestra Señora, pero lo que dice, e incluso lo que no dice, es de una luminosidad extraordinaria. Y su luz llega hasta nosotros, anclados en esta segunda década del siglo XXI.

A modo de ensayo quiero proponer aquí algunos valores de vida de José de Nazaret, de su camino de santidad, que pueden iluminar nuestro seguimiento de Jesús en medio de los avatares de la historia que nos toca vivir. Gracias a ellos podemos decir que san José constituye una escuela actual de espiritualidad.

1. Una vida en clave de convivencia : José ha tenido la dicha de vivir su existencia en convivencia con Jesús y María, participando de los mil detalles que llenan la vida cotidiana, los gozos y las penas, las incertidumbres, los pequeños rituales que jalonan la vida familiar. De la convivencia nace el conocimiento del otro, y la experiencia del verdadero amor.


2. Una vida en clave de servicio: José no ha vivido para sí mismo, sino para los demás. Primero, en consonancia con su vocación de esposo y padre, al servicio de Jesús y María, y, luego, a través sobretodo de su trabajo de artesano, con el resto de la gente. 

3. Una vida guiada por el Espíritu Santo: El gran protagonista de la vida de José es Dios mismo que va guiándole, mostrándole los pasos que ha de dar, previniéndole en el camino, llenando su corazón de sabiduría y fortaleza para el cumplimiento de su misión. Es la experiencia del Espíritu de Dios en la vida del creyente.

4. El trabajo, camino de santidad: José ha vivido del sudor de sus manos, conoce las fatigas del trabajo, el esfuerzo cotidiano por lograr el sustento, un camino de santificación y de servicio, para la gloria de Dios y la plena realización de nuestra humanidad. En esta experiencia reconocemos la gran dignidad del trabajo humano, que nos hace partícipes de la obra creadora y servidores de nuestros hermanos y hermanas.

5. Una vida en clave de oración y contemplación: José ha contemplado de cerca el misterio mismo de la Encarnación del Verbo, quizás por eso su silencio está cargado de esa presencia de lo divino que excede las palabras humanas. Toda la vida de José es oración: acción de gracias, petición, alabanza a Dios, adoración, y, ello en medio de las vicisitudes de la vida cotidiana y del martilleo de la carpintería.

6. Una experiencia de fe radical: El camino de José ha estado marcado por la noche oscura de la fe: el embarazo de María, el pesebre, la huida a Egipto, el extravío de Jesús a los doce años, el transcurrir de los años en el silencio de Nazaret,... Una experiencia radical de fe desnuda en Dios, que lo convierte en digno heredero de Abraham, nuestro padre en la fe.

7. Una vida en clave solidaria: Su vida dedicada al trabajo artesanal lo hace particularmente sensible a la situación de los trabajadores, especialmente de aquellos que se sienten oprimidos bajo sistemas sociales basados en el lucro y la explotación: bajos salarios, el paro, precariedad laboral,...José nos muestra el camino de la solidaridad cristiana y de búsqueda de aquellos valores que nos enseñó Jesús en el Sermón de la Montaña: el amor, la justicia, etc.

8. Amor a la pobreza y simplicidad de vida: Frente al consumismo individualista que nos asedia, José nos invita a amar la pobreza y a buscar un modo de vida sencillo, en contacto con la naturaleza y optando siempre por los más pobres. Todo un modelo profético de vida, frente a las desigualdades e idolatrías de hoy.

9. Una vida en clave de humildad: Si una virtud define a san José es su profunda humildad, delante de Dios y de los hombres. Unido indefectiblemente a Jesús y María en el misterio de su vida, ha cedido el protagonismo a Dios, y ha sabido permanecer en silencio, en actitud de obediencia y disponibilidad. Qué lejos estamos aquí del famoseo que se promueve como valor en ciertos programas televisivos.

10. Una santidad laical: José de Nazaret ha vivido su experiencia de fe desde su vocación de laico, como esposo de María, la Madre del Señor, y como padre nutricio de Jesús. Esposo y padre, dos tareas difíciles ayer y hoy, vividas a plenitud, responsablemente. Todo un camino de santidad.

Estos valores, y otros más, que descubrimos en san José son también para nosotros y nosotras hoy. Ahora toca lo más importante: ¡vivirlos!

Pidamos al Espíritu Santo que nos llene de sus bendiciones, por la oración y el ejemplo de san José, para que vivamos a plenitud nuestra vocación en la Iglesia en el seguimiento a Jesucristo, bajo la guía del santo Evangelio. Amén.